Sabemos que las personas son el centro de las organizaciones, sin éstas no hay organización, por lo cual, garantizar una mejor calidad de vida a los empleados puede crear distintos beneficios a las organizaciones.
Esto va más allá de una remuneración económica, implica lograr que los empleados se sientan valorados y que el trabajo no se vea como un impedimento para lograr una vida privada. Reconocer los resultados así como los esfuerzos que se impregnan en las actividades, son incentivos de un entorno de trabajo estimulante; por sí mismos generan un compromiso óptimo del empleado y una mejor productividad.
Estos son los distintos niveles sobre los cuales podemos actuar para mejorar la calidad de vida de los empleados.
Entorno Físico
Siguiendo la teoría de Maslow, la base de todo se congrega en las necesidades fisiológicas así como de seguridad, por lo cual, se debe garantizar un entorno de bienestar para los empleados, donde puedan desarrollar sus actividades de forma cómoda y segura.
Salud y Bienestar
Tener en la mayor medida posible los medios para lograr una vida saludable, tanto de forma física como psicológica. No hay mejor forma de potenciar la productividad cuando la mente y cuerpo trabajan en conjunto de forma armoniosa.
Relaciones Interpersonales
Crear un ambiente donde el compañerismo, confianza y respeto sean los pilares de la comunicación que se realizará en las organizaciones.
Reconocimiento
Es valorar el trabajo de los empleados, reconociendo sus esfuerzos y trabajos. Si uno siente que su trabajo es primordial para que la empresa pueda seguir existiendo, eso lo cambiará todo.
Desarrollo Personal
Así como un empresa con el tiempo se engrandece, sus empleados deben crecer tanto de forma personal como profesional. Una empresa grande debe de estar poblada por empleados que estén desarrollados y preparados. Por eso, uno debe lograr factores que lo permitan.